La Île de la Cité o por su nombre en español, la isla de la ciudad es la cuna de la ciudad, el corazón vibrante de esta hermosa ciudad y el lugar de fundación de la capital. La Île de la Cité es, al igual que la Île Saint-Louis, una de las islas naturales que se encuentran en el Sena. Se encuentra en medio del río Sena, en el corazón de la ciudad de París, Francia.
La historia de París es una muy curiosa y se puede decir que todo comenzó en esa pequeña isla en el año 250 antes de Cristo. Los inicios de la ciudad se remontan a una pequeña tribu gala llamada los parisii vivía en la isla. La zona era rica en pesca y en caza y el acceso de un lado a otro del Sena era más fácil gracias a la estrechez del río. La ciudad creció y fue prosperando, hasta que en el año 506 se convirtió en la capital del reino y adquirió el nombre de Cité. Tras convertirse en una ciudad fortificada, la isla tuvo que soportar los ataques continuos de las tropas normandas. Durante la Edad Media la ciudad ya poseía un importante núumero de población, y se convirtió en el centro político, cultural y espiritual de Francia.
Toda esta zona de París era inundable o pantanosa por lo que se inundó por completo en 1197. Muchos proyectos fueron elaborados a mediados del siglo XIX para devolver a la isla de la Cité el papel central de sus orígenes.
La Île de la Cité es una de las zonas más agradables de París, y allí se encuentran algunas de las principales atracciones de la ciudad, como es el caso de la Catedral de Notre Dame, la Sainte Chapelle o la Conciergerie. Además de los edificios históricos, la Île de la Cité ofrece agradables calles y plazas para pasear en las que se pueden encontrar hermosos lugares como el mercado de las flores de la Place Louis Lépine.